Nombre en
latín – Bootes
Nombre en español – Pastor / Boyero
Nombre genitivo – Bootis
Abreviación – BOO
La constelación del Pastor es observable a finales de primavera
– principio de verano. De entre sus objetos destaca la estrella principal
(Arturo) y el cúmulo globular NGC 5466.
Estrellas
principales:
Letra
|
Su Nombre |
Magnitud
|
+ Info |
a |
Arturo / Arcturus |
-0.04 |
Estrella fácil de encontrar,
ya que es la continuación de la cola de la Osa Mayor. 4ª
estrella más brillante del firmamento |
h |
Mufrid |
2.68 |
— |
e |
Izar |
2.7 |
Estrella binaria, compañera
de magnitud 5.12 |
g |
Seginus |
3.03 |
— |
d |
HR 5681 |
3.47 |
Estrella binaria |
b |
Nekkar |
3.5 |
— |
|
(Estrellas de hasta magnitud 5)
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Mitología e historia [por Manuel Gutiérrez]
Representa al pastor que vigila los siete bueyes del norte (Septem triones), es decir, las siete estrellas que forman el asterismo principal de la Osa Mayor.
El pastor es Árcade, hijo de Calisto y Zeus, y padre de los arcadios.
La estrella principal, Arcturus, está situada en la prolongación del arco que forma la cola de la osa, de donde deriva su nombre (Arctos urssae).
Calisto, hija de Licaón, había sido amada por Zeus y quedó encinta, su esposa Hera la convirtió en Osa. (Ver Osa Mayor)
Árcade, su hijo, se crió sin conocer a su madre y cuando tenía quince años, cazando en el bosque, se encontró con ella. Él retrocede ante una osa que se le acerca. Ella reconoce en el joven a su propio hijo. Su amor maternal le hace acercarse más y él se defiende: está apunto de surgir la tragedia. En este momento Zeus, responsable de todo lo sucedido, se apiada de ambos y soplando produce un viento que arrebata a los dos llevándolos al cielo transformando a Calisto en la Osa Mayor y Árcade en su perpetuo cuidador en el Boyero.
Hera, ofendida por la humillación de ver a rival convertida en diosa en el cielo, descedió al mar y convocó a Tetis y Océano a los que pide el desprecio con estas palabras: Arrojad de vuestras azules aguas a las estrellas del Septentrión, lanzad lejos esas estrellas recibidas en el cielo por una recompensa vergonzosa, para que una adúltera no se bañe en vuestras puras aguas
(Ovidio, Metamorfosis).
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